Cuando una puerta se cierra...

Buenos días ángeles ocultos:
Sé que pensáis que ando un poco desaparecida, pero lo cierto es que tengo mucho trabajo pendiente y pocas horas a las que dedicar todos mis esfuerzos. Además, últimamente estoy un poco cansada.  ¿Por qué?, os preguntaréis. Sencillo, más de tres años de lucha para acabar escuchando lo mismo una y otra vez, agotan a cualquiera.
Jamás me he considerado una mujer que se rindiera a la primera. De hecho, mucha gente me considera luchadora, optimista y vital, pero últimamente esas cualidades parecen desaparecer.
Todos vosotros sabéis que llevo mucho tiempo peleando con las editoriales para conseguir que publiquen mis libros y poder llegar a todos vosotros. Sois tantos los que me brindáis vuestro apoyo incondicional, que incluso con algunos de vosotros he llegado a entablar una amistad preciosa, a pesar de la distancia y de no conocernos en persona.
Siempre he dicho que sin vuestro apoyo incondicional me hubiera rendido hace mucho tiempo. Hoy reitero eso.
Ayer recibí la respuesta de una editorial que estaba valorando la Saga el Ángel, (El Ángel de la Destrucción, La Llama del Ángel y Almas Gemelas) para su posible publicación.
Bien, por enésima vez me encontré con un no. A pesar de que ellos han hecho una valoración positiva de la saga, el cupo de ediciones lo tienen cerrado hasta el 2016, y por tanto, no pueden hacer que espere tanto tiempo.
Como veis, otra puerta que se cierra.
Mis obras, todas y cada una de ellas, están en manos de otras editoriales. Así que espero que, a pesar de haberse cerrado esta puerta, se abra una ventana y un día os pueda dar la grandísima y agradable noticia de que todos estos esfuerzos, han dado sus frutos.
Mientras tanto, mi cabreo, cansancio y yo, vamos a pelearnos un rato con el ordenador, a ver si hacemos algo productivo.
Como siempre, mil millones de gracias por estar ahí, siempre alentándome y apoyándome.
Un beso, un abrazo y un mordisco.